Este 11 de marzo de 2025 se cumplen cinco años desde que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró al COVID-19 como una pandemia global. Lo que comenzó como un brote de un nuevo coronavirus en Wuhan, China, se convirtió en una crisis sanitaria sin precedentes, afectando a millones de personas en todo el mundo y transformando la vida cotidiana, la economía y los sistemas de salud.
Desde entonces, la humanidad ha pasado por confinamientos masivos, avances científicos sin precedentes en el desarrollo de vacunas, y la adaptación a una nueva normalidad. Según la OMS, la pandemia ha dejado más de 700 millones de contagios y al menos 7 millones de muertes confirmadas, aunque el número real podría ser mucho mayor.
Cinco años después, el COVID-19 sigue presente, aunque con menor impacto gracias a la inmunización y los tratamientos mejorados. Sin embargo, las secuelas económicas, sociales y sanitarias persisten en muchas regiones, recordándonos la importancia de fortalecer los sistemas de salud y la preparación ante futuras crisis epidemiológicas.