
Este 9 de mayo, Rusia celebró a gran escala el 80º aniversario del Día de la Victoria, que conmemora la derrota de la Alemania nazi por parte del Ejército Rojo y el pueblo soviético durante la Gran Guerra Patria (1941-1945). En todo el país se realizaron actos conmemorativos, destacando el desfile militar en la Plaza Roja de Moscú, al que asistieron cerca de 30 líderes extranjeros.
Uno de los momentos destacados fue la presencia del presidente chino Xi Jinping, quien se ubicó junto al presidente ruso, Vladimir Putin, en la plataforma principal del evento. Durante su intervención, Putin hizo un llamado a preservar el legado histórico del Ejército Rojo y destacó la unidad del pueblo ruso frente a desafíos actuales.
“Rusia ha sido y será una barrera indestructible contra el nazismo, la rusofobia y el antisemitismo”, afirmó.
El mandatario también subrayó la participación de otras naciones aliadas durante la Segunda Guerra Mundial, incluyendo los países de Asia Central, Transcaucasia y China, así como los ejércitos aliados occidentales y movimientos de resistencia.
En Kazán y otras ciudades, se realizaron marchas militares y la tradicional procesión del «Regimiento Inmortal», suspendida desde 2022, volvió a recorrer el centro de la ciudad. Estas actividades contaron con una alta participación ciudadana.
Según un estudio publicado por la cadena estatal RT, el 89% de los encuestados considera el Día de la Victoria como una fecha de gran significado, mientras que el 88% lo asocia directamente con el homenaje a los veteranos y a los antepasados que participaron en el conflicto. Entre los símbolos más representativos destacan la cinta de San Jorge, el estandarte de la victoria y la llama eterna.
Además, los ciudadanos manifestaron su interés en mantener vivas estas tradiciones a través de actividades como ver películas históricas (89%), asistir a desfiles (86%) y participar en eventos culturales como conciertos, exposiciones o festivales de equipamiento militar.
El Día de la Victoria continúa siendo una de las fechas más relevantes del calendario nacional ruso, con un fuerte componente de memoria histórica y unidad social.