El viernes 28 de septiembre de 2024, a las 22:30, una familia fue baleada por sicarios en Portoviejo, la capital de la provincia de Manabí. Las víctimas se encontraban circulando en su vehículo por la avenida 5 de Junio cuando los atacantes abrieron fuego.
En el automotor viajaban una pareja y sus dos hijos, de cinco meses y cuatro años. Según testigos, los ocupantes intentaron huir, pero unas cuadras más adelante sufrieron un accidente al chocar contra otro vehículo, lo que facilitó el ataque de los sicarios.
Como resultado del ataque, el hombre y la mujer perdieron la vida en el lugar. El bebé fue trasladado a una casa de salud, pero lamentablemente no pudo sobrevivir a las heridas. El otro niño, de cuatro años, resultó ileso.
Al lugar del suceso acudieron agentes de la Dirección Nacional de Delitos contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestros (Dinased), junto con personal de Criminalística, que se encargó de levantar evidencias y realizar las investigaciones pertinentes.
Este trágico incidente ha generado preocupación en la comunidad, que clama por una respuesta contundente ante la creciente violencia en la región.