La preocupación crece en las localidades ecuatorianas de Tulcán y El Carmelo, cercanas a la frontera con Colombia, debido al brote de fiebre amarilla que afecta al departamento colombiano.
Las autoridades colombianas han declarado alerta sanitaria amarilla en varias zonas y naranja en la ciudad de Ipiales, luego de que se confirmaran 79 casos y 36 muertes, según el Instituto Departamental de Salud de Nariño (IDNS).
La fiebre amarilla, enfermedad viral transmitida por mosquitos, puede ser mortal si no se trata a tiempo. La vacunación sigue siendo la única medida preventiva efectiva.
Durante la Semana Santa, más de 25.000 ecuatorianos cruzaron hacia Colombia, muchos por motivos religiosos o de compras, ignorando las advertencias sanitarias. Se estima que unos 8.000 devotos de la Virgen de Las Lajas hicieron caminatas desde Carchi e Imbabura hasta el santuario en Ipiales.
Los primeros casos en la zona fronteriza se reportaron en las veredas El #Empalme y Resguardo Santa Rosa, donde una de las dos personas infectadas falleció, elevando la tasa de letalidad al 50 % en esa área específica.
El puente internacional de Rumichaca, principal paso entre ambos países, se ha convertido en un foco de vigilancia. Mientras Colombia alista controles más estrictos para los viajeros, Ecuador aún no ha emitido medidas concretas al respecto.
Ante el riesgo de propagación del virus hacia zonas más pobladas, el Ministerio de Salud de #Colombia ha iniciado campañas masivas de vacunación, dirigidas a todos los ciudadanos desde los 9 meses de edad, incluidos adultos mayores.