El futbolista neerlandés Quincy Promes, de 33 años, fue extraditado desde Dubái hacia Países Bajos para enfrentar condenas por narcotráfico y agresión. El traslado, efectuado bajo estrictas medidas de seguridad, fue confirmado este viernes 20 de junio por el medio neerlandés De Telegraaf.
Promes, exjugador del Ajax, Sevilla y Spartak Moscú, deberá cumplir una sentencia de seis años de prisión por participar en el envío de 1.350 kilos de cocaína desde Brasil al puerto de Amberes, Bélgica, en 2020. Además, enfrenta otra condena de 18 meses por apuñalar a su primo durante una fiesta familiar en julio del mismo año. Ambos procesos se encuentran en fase de apelación.
El futbolista fue arrestado por primera vez en Dubái en marzo de 2024, gracias a una alerta de Interpol emitida por Países Bajos. Aunque inicialmente fue liberado bajo restricciones, logró unirse brevemente al club United FC de la segunda división de Emiratos Árabes Unidos antes de ser detenido nuevamente y extraditado.
La entrega de Promes fue posible gracias a un tratado de extradición firmado en 2021 entre Emiratos Árabes Unidos y Países Bajos. Durante meses, las autoridades neerlandesas enfrentaron obstáculos, ya que el jugador residía en Rusia, país con el que no existe un acuerdo de extradición.
Promes, quien acumuló 50 partidos con la selección de Países Bajos y fue elegido Futbolista del Año en Rusia en 2017, vio su carrera desplomarse tras verse implicado en estos escándalos judiciales. Su abogado, Cem Polat, sigue adelante con los recursos de apelación, mientras Promes permanecerá bajo custodia en espera de nuevas audiencias.
Su caso ha sacudido al mundo del deporte, al evidenciar el abrupto final de una trayectoria que lo llevó a brillar en clubes europeos y representar a su país en torneos internacionales.
Fuente: El Diario Ecuador