Un grupo de 60 militares, junto con personal de la Agencia de Regulación y Control Minero (ARCOM), la Fiscalía y la Policía Nacional, ejecutaron un operativo contra la minería ilegal en la parroquia Ahuano, sector Dorado Huambuno, en las concesiones 1, 2 y 3. En el lugar, se localizaron 11 excavadoras cerca de la carretera, que fueron inhabilitadas por afectar el entorno natural.
Según el Ejército, las máquinas estaban cubiertas apenas por una vegetación ligera, y se podía escuchar claramente su funcionamiento. ARCOM colocó sellos de inhabilitación en las 11 máquinas, además de tres clasificadoras tipo Z y dos motores de succión empleados en actividades ilícitas.
Durante la operación en Ahuano no hubo detenidos, ya que los operadores huyeron hacia la selva al percatarse de la presencia militar. Las autoridades indicaron que frecuentemente se emiten alertas desde la población, lo que dificulta las intervenciones:
«No sé de qué manera, pero ya tienen conocimiento de nuestra presencia», señalaron.
La intervención continuó en la parroquia Misahuallí, donde se colocaron sellos en dos excavadoras adicionales y se detuvo en flagrancia a dos personas, presuntamente vinculadas a la explotación ilegal de recursos mineros. Estas personas fueron entregadas a las autoridades competentes.
El personal militar destacó la grave afectación ambiental, con grandes extensiones de selva deforestada, pozos de agua y zonas de tierra expuesta, evidenciando el impacto de la actividad minera irregular en la provincia.